Nuestra residencia se caracteriza principalmente por su ambiente familiar. Los residentes y el equipo de trabajadores de la Residencia de Almarza formamos una gran familia en la que priman la atención y el valor humano. Conocemos bien a cada una de las personas que viven en la residencia, somos conscientes de sus necesidades, les apoyamos en el día a día. En la Residencia de Almarza trabajamos por el bienestar de nuestros residentes otorgándoles un trato personalizado.
Con un entorno privilegiado, a escasos 15 minutos de Soria, todas nuestras instalaciones son propicias tanto para el descanso y la tranquilidad, como para la convivencia, así como para fomentar las visitas de familiares y amigos.
Nuestro principal objetivo es crear calor del hogar. Por ese motivo, trabajamos día a día para lograr que todos nuestros residentes se sientan como en casa, garantizando así su comodidad y la tranquilidad de sus familiares.